Last Updated on October 7, 2025 by Toya
Para esos días en los que quieres disfrutar de rollitos de canela recién horneados y calientes, pero no quieres comprometerte con una tanda grande, ¡esta receta es ideal! Mi receta fácil de rollitos de canela en pequeño lote rinde solo 6 rollitos esponjosos, perfecta si vives en un hogar pequeño, en pareja, o si simplemente no quieres sobras.

Y aunque son en pequeño lote, estos rollitos son suaves, pegajosos, con una masa hecha desde cero y tan deliciosos que desearás haberlos probado mucho antes.
Ingredientes
Para el fermento de levadura
- 60 ml de agua tibia (37–43 °C)
- 3 g de levadura seca activa (aprox. 1 cucharadita)
- 2 g de azúcar (½ cucharadita)
Para la masa
- 170 g de harina de trigo todo uso
- 45 ml de leche (a temperatura ambiente)
- 25 g de azúcar
- 3 g de sal (½ cucharadita)
- 35 g de mantequilla derretida
Para el relleno
- 50 g de azúcar moreno
- 30 g de mantequilla sin sal (blanda)
- 4 g de canela en polvo (1 ½ cucharadita)
Para el glaseado
- 60 g de azúcar glas
- 1 ml de extracto de vainilla (¼ cucharadita)
- 20 ml de leche
Utensilios que necesitarás
- Molde pequeño para hornear: yo usé una fuente cerámica de 15,5 × 22 cm, perfecta para 6 rollitos. También puedes usar un molde redondo de 18 cm o cuadrado de 20 cm.
- Rodillo: esencial para estirar la masa en un rectángulo. Si no tienes, puedes usar una botella de vidrio limpia.
- Cuencos para mezclar: necesitarás varios, uno para la levadura, otro para la masa, otro para el relleno, otro para el glaseado, y alguno extra.
- Batidor de varillas: útil para mezclar el fermento, batir el glaseado y combinar ingredientes secos. Un tenedor también sirve, pero el batidor da mejores resultados.
- Tazas y cucharas medidoras: la precisión es clave en la repostería.
- Báscula de cocina (opcional, pero recomendada): medir por peso asegura exactitud y resultados consistentes.
Cómo hacer rollitos de canela en pequeño lote

- Prepara el fermento: En un cuenco pequeño mezcla el agua tibia, la levadura y el azúcar. Deja reposar de 5 a 10 minutos.
- Nota importante: si la levadura está activa, se formará espuma y burbujas en la superficie. Si no ocurre nada, la levadura ya no sirve y deberás empezar de nuevo con levadura fresca.
- Mientras tanto, mide y organiza todos los demás ingredientes.
- Forma la masa: Pasados los 10 minutos, en un cuenco mediano mezcla el fermento, la mantequilla derretida, la leche, el azúcar y la sal. Añade la harina poco a poco y mezcla hasta que se forme una masa.
- Si está muy pegajosa, añade 1 cucharada (8 g) de harina a la vez hasta que se pueda trabajar.
- Amasa sobre una superficie ligeramente enharinada durante 5–7 minutos.
- Coloca la masa en un cuenco engrasado, cubre y deja reposar en un lugar cálido hasta que doble su tamaño (aprox. 1 hora). Si no ha subido lo suficiente, deja reposar 30 minutos más.
- Prepara el relleno: mezcla en un cuenco pequeño el azúcar moreno con la canela. Incorpora la mantequilla blanda.
- Estira y enrolla: Extiende la masa en un rectángulo de unos 20 × 30 cm (aprox. 0,5 cm de grosor). Unta la mezcla de canela y azúcar uniformemente sobre la masa.
- Enrolla desde el lado más corto, ajustado pero no apretado. A medida que enrollas, estira suavemente los bordes para que queden uniformes.
- Corta y coloca: Divide el rollo en 6 piezas iguales y colócalas en el molde engrasado. Cubre y deja reposar de nuevo hasta que crezcan (45–75 min, según la temperatura de tu cocina).
- Truco pro (para más suavidad y jugosidad): vierte 60 ml de nata líquida (crema para montar) sobre los rollitos justo antes de hornear. Hará que queden mucho más tiernos y cremosos.
- Hornea: Lleva al horno precalentado a 175 °C durante 20–22 minutos, hasta que estén dorados.
- Glasea y sirve: Deja enfriar unos minutos. Mezcla el azúcar glas, la leche y la vainilla hasta obtener un glaseado suave, y viértelo sobre los rollitos todavía tibios.
Consejos y trucos
- Si la levadura no espuma: el agua estaba demasiado caliente (mató la levadura) o demasiado fría (no la activó). Repite con agua tibia.
- Si la masa no sube: busca un lugar más cálido (como dentro del horno apagado con la luz encendida).
- Si la masa está pegajosa: añade harina poco a poco.
- Si está seca o dura: agrega 1 cucharadita de leche o agua hasta suavizar.
- Para cortes limpios: usa un cuchillo de sierra afilado o hilo dental sin sabor.
- Para evitar bordes secos: si se doran muy rápido, cúbrelos con papel de aluminio.
Sugerencias para servir
Los rollitos de canela están en su punto cuando se comen recién horneados, con el glaseado aún tibio que se derrite entre las capas. Acompáñalos con fruta fresca, huevos revueltos, café caliente, té chai especiado o un buen chocolate caliente.
También puedes cambiar el glaseado sencillo por un frosting de queso crema para darles un toque de pastelería.
Son perfectos para ocasiones especiales: cumpleaños, fines de semana acogedores, la mañana de Navidad o un desayuno romántico en San Valentín.
Conservación
- En la nevera: guárdalos en un recipiente hermético hasta 1 semana. Caliéntalos en el microondas 20–25 segundos o al horno a 150 °C durante 10 minutos.
- En el congelador: congela los rollitos horneados hasta 2 meses, bien envueltos. Descongela durante la noche y recalienta.
- También puedes congelar los rollitos ya formados (antes del segundo levado). Para hornear, descongélalos toda la noche, deja que leven y luego hornéalos normalmente.
